Por María Lozano
Les aseguro que todo lo que hicieron
por uno de estos hermanos míos
Más humildes, por mí mismo lo hicieron
Mateo 25: 40
¡Ayudar a los más humildes, es hacer lo que el Señor desea,
es cumplir su voluntad, es servir a Dios!
Los actos de generosidad y amor, son aquellas pequeñas
acciones que nos dignifican como humanos, nos alegran el corazón y nos hacen
sentir vivos.
Aunque algunos no tomen conciencia de esta verdad, Dios
habita en nuestra vida. Jesús mismo, se
ubica como receptor de nuestras obras de caridad hacia los más necesitados. Él
agradece y se alegra de tales acciones.
¡Que te podamos reconocer en el otro!
No hay comentarios:
Publicar un comentario