Tomado de: El Poder de Orar
Por María lozano
" Por eso tengo el corazón lleno de gozo; mi boca está llena de alabanzas. Todo mi ser descansa con tranquilidad" Salmos 16:9
La primera razón por la cual somos felices aquellos que ponemos a Dios en primer lugar en nuestra vida es porque contamos con su respaldo y protección. Todos nosotros vivimos en un mundo hostil e injusto, donde diferentes calamidades ocurren, pero que bueno es saber que el Señor nos protege y nada pasa si Él no lo permite. Cuando Dios llamo a Abraham a dejar su tierra y parentela le prometió que durante toda su vida de peregrino gozaría de su protección divina: “Después de estas cosas vino la palabra de Jehová a Abram en visión, diciendo: No temas, Abram; yo soy tu escudo, y tu galardón será sobremanera grande”, (Génesis 15:1). De la misma forma no debemos temer sino poner toda nuestra confianza en Dios y creer que su presencia nos protegerá en medio de este mundo. El saber es motivo de gran felicidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario