Tomado de: Comunidad El Camino
Por María Lozano
Éxodo 13:20-22: “Y partieron de Sucot y acamparon en ETAM, a la entrada del desierto y Jehová iba delante de ellos, de día en una columna de nube para guiarlos por el camino y de noche en una columna de fuego para alumbrarles, a fin de que anduvieran de día y de noche. Nunca se apartó de delante del pueblo la columna de nube, ni de noche la columna de fuego.”
De la misma manera en que Dios cuidó de su pueblo Israel de día y de noche, cuida de nosotros a cada instante, porque también somos Su pueblo. Lo dice 1 Pedro 2:9 “…ustedes son nación santa, pueblo adquirido por Dios”.
También Isaías 41:13 nos dice: “Porque yo soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: no temas, yo te ayudo”.
Así lo hace conmigo todos los días, y así lo quiere hacer con vos. El está en medio nuestro y se gozará con nosotros con alegría. ¡Pruébalo! No se apartó del pueblo, no se apartará de nosotros.
Pon tu mano en la de Él, como lo haría un niño que espera ser conducido. Dale gracias en este día porque Su presencia es segura. Dale gracias especialmente porque haberte hecho parte de Su pueblo, lo cual no fue barato ya que costó un alto precio.
Antes de moverte hoy… antes de tomar alguna decisión… levanta tu voz y dile: “Señor, hoy también necesito tu guía”...
Carmen Mayo de Klink