Tomado de: Reflexiones cristianas
Por María Lozano
No, la vida no es solo diversión. No está prohibido reír, por supuesto, pero no nos dejemos anestesiar por el espíritu de despreocupación y ligereza que reina en nuestra época. El sabio Salomón dijo: “Aún en la risa tendrá dolor el corazón, y el término de la alegría es congoja” (Pr.14:13). Sepamos alegrarnos en el Señor Jesús, en la lectura de la Biblia, en la oración, en la alabanza y cada vez que descubramos manifestaciones de su bondad en nuestra vida cotidiana. Entonces podremos decir a Dios:”Tú diste alegría a mi corazón mayor que la de ellos cuando abundaba su grano y su mosto” (Salmo 4:7).
No hay comentarios:
Publicar un comentario