Tomado de: Potencial para cada día ( Miles Munroe)
Por María lozano
Yo te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi iglesia, y las puertas del reino de la muerte no prevalecerán contra ella. (Mateo 16: 18).
Cómo se siente o qué dicen otros de usted no es importante. Usted es quien Dios dice que es; Él ve en usted más de lo que puede usted imaginar. Su potencial está limitado solo por Dios, no por otros.
Dios vio en Pedro lo que otros no vieron. Había recibido el nombre de Simón, que significa “manso”. (Literalmente significa “inestable, variable, débil”) Cuándo Jesús se encontró con Simón, era el hombre más variable, la hoja más débil que haya conocido. Siempre seguía la corriente del viento, cambiaba su mente. Pero Dios vio una piedra en la débil hoja. La primera vez que Jesús se encontró con Pedro le cambió el nombre de Simón (hoja) a Pedro (piedra). Aunque Simón era un muchacho inestable, Jesús le dijo: “Te voy a cambiar el nombre . Tu nombre es Pedro”.