El deseo de Dios....

 Tomado de: Habitante

Por María Lozano

Cuando siento que las cosas se me están poniendo difíciles y no entiendo qué está pasando ni cuál es el propósito de nada, pienso esta reflexión que me compartió una monja hace unos años cuando falleció mi mamá...
Imagina que encima de ti tienes un manto enorme de bordado, quien lo está bordando es Dios. Tú desde abajo solo alcanzas a ver un montón de hilos deshilachados y nudos que no entiendes, sin embargo. Dios, desde arriba está tejiendo una hermosa obra de arte, el bordado más increíble, un paisaje lleno de colores y de vida. A veces nosotros no lo podemos ver, pero Dios siempre está tejiendo a nuestro favor, siempre nos está creando el más bello paisaje, aunque nosotros desde abajo no lo comprendamos, lo mejor que podemos hacer es confiar en él y entregarle las agujas para que pueda hacer con nuestra vida una hermosa obra de arte, mucho mejor que lo que nosotros podríamos hacer solos.
Esta reflexión a mí me regaló una paz enorme en momentos cuando no comprendía por qué me había sucedido esa tragedia, por qué se había llevado a mi mamá tan de repente, por qué me había hecho eso la vida? Y aunque nunca dejo de extrañarla, hoy comprendo que dentro de toda la tragedia, nunca dejó de estar Dios y su protección.
A veces suceden cosas que no nos gustan, injusticias, desgracias y no, nunca serán bienvenidas, pero al final, siempre cobran sentido... Solo confía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entrada destacada

La práctica de hacer regalos silenciosos

 Tomado de: Alfonso De Caro  Por María Lozano -Busca un lugar público, como una plaza, un parque, una estación, y colócate en un sitio que t...