Enfrente a sus gigantes

Tomado de: Patagónia Teológica ( Max Lucado)
Por María Lozano


El Rey David, es uno de mis personajes favoritos pues no pudo ser más humano y equivocarse más, pero sin embargo fue la única persona en la Biblia de quien Dios dijo "un hombre conforme a mi corazón", así que siempre he querido saber que hizo David para que el Señor a pesar de sus debilidades lo eligiera como un hombre especial.
Max Lucado realiza un análisis hermoso de la persona de David en este libro "Enfrente a sus gigantes",...
enseñandonos que así como David pudo caerse tantas veces y ponerse de pie, nosotros también podemos caer, levantarnos y enfrentar nuestros gigantes con la fe en Jesucristo.
En el primer capítulo de este libro se narra la porción de la escritura donde David, un pastor indefenso, vence al filisteo Goliat con 5 piedras y una honda, pero su arma más poderosa es: su fé en Dios, la cual muestra cuando le dice al rey Saúl : " Jehová, que me ha librado de las garras del león y de las garras del oso, él también me librará de la mano de este filisteo." (1 Samuel 17:37)
David no ve al gigante cuando va a derrotarlo, sólo ve a Dios. El grito de guerra de David nos lo revela : "Tú vienes a mí con espada y lanza y jabalina; mas yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has provocado. "
(1 Samuel 17:45)
Cuál es su Goliat? ... Golliat es aquel gigante que estás enfrentando hoy. Tal vez el desempleo, la pérdida de un ser querido, la tentación, la adicción, la depresión, la ansiedad. Usted conoce muy bien el bramido de Goliat, reconoce sus pasos y su voz.
Pero fíjese en un detalle que usted no está tomando en cuenta, David no solo escuchaba y veía a este gigante, también escuchaba la voz de Dios.
A los gigantes debemos enfrentarlos, sin embargo siempre queremos hacerlo solos, porque nos creemos autosuficientes, valientes, nadie nos comprenderá, nadie nos puede ayudar....por eso terminamos cansados, agobiados, agotados y sin fuerzas para continuar. Pero si usted se centra PRIMERO y PRINCIPALMENTE en Dios, su victoria será como la de David, simplemente INCREIBLE y usted la podrá contar como testimonio de la grandeza de nuestro Dios.
"El Señor da la victoria sin espada ni lanza. Porque ésta es una guerra del Señor, y él los entregará en nuestras manos". (1 Samuel 17:47) 
* Gracias Jackie

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