Por Maria Lozano
Remar la vida no es fácil,
pero tampoco difícil.
Es compleja como el hombre,
que a veces se contradice.
Si vas contra la corriente,
gastarás más energía,
salpicarán gotas frías
y algunas molestarán,
y hasta olvidarás el Sol
que te abriga con sus rayos.
Cuando algo se complica...
...pues, deja ya de remar,
relájate y deja pasar,
disfruta de ese paisaje
que seguro lo ignoraste
cuando no podías más.
Total, qué mal va a pasar
cuando el hombre frena el paso
para descansar los brazos
y retomar su remar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario