Salmo 20: 4

Tomado de: Reflexiones Bíblicas
Por maría Lozano

Salmo

«Que él te conceda lo que tu corazón

Anhela y haga realidad todos tus planes».

Este versículo es uno de mis favoritos, esta es una forma hermosa de demostración que el amor de Dios tiene para nosotros, que nos promete conceder lo que anhela nuestro ser, que su misericordia , bondad y su amor son infinitos, tanto que nos cumplirá lo que nuestros corazones atesoren. Cuando estamos orando debemos comunicarnos de forma sincera, con fe, esto agrada a Jehová, que la oración y la alabanza sea una confirmación de fe, de esta manera reflejaremos nuestro cariño a Jehová y él hará maravillas para nuestras vidas.

Si nuestra oración con DIOS es sincera y nuestro corazón no alberga malicias, confiemos que nuestra oración será oída y recibiremos el apoyo, ayuda, la respuesta de Dios y siempre será de acuerdo a sus planes y derramará bendiciones que jamás nos imaginamos.

Dios oye nuestras oraciones, bendice nuestros proyectos, encamina nuestros más grandes deseos, y esto se debe gracias a su majestuosa gloria y también es gracias a que como hijos de Dios cumplimos sus mandamientos, obedecemos su ley y andamos por la vida con armonía sin dañar al prójimo....

A nuestro Jehová le agrada que andemos por buenos senderos, que oremos a cada mañana y noche, que esa comunicación íntima sea de confesión, perdón y alabanza. De esta forma siempre pero siempre seremos siervos de Dios, nuestras plegarias serán oídas y tendremos respuestas favorables más de lo que nos esperábamos. ¡Qué grande es la misericordia de Dios, aleluya!

Amemos a JEHOVA, para que el deseo de nuestros sueños que albergamos en nuestros corazones se cumplan, que nuestras metas sean bien guiadas y alcanzadas gracias a la misericordia del SEÑOR.

Hoy reconozcamos que los planes de Dios son perfectos y a su debido tiempo, que nuestras victorias son gracias a EL, RECONOZACOMOS que él concede todo, prosperidad, sanación, alimento, abrigo y muchas bendiciones innumerables.

Pongamos a Dios en primer lugar, confiemos en él, hagamos conocer al mundo sus enseñanzas, qué mejor manera de agradar y agradecer sus bendiciones.