Tomado de: El Poder de Orar
Por María Lozano
El Salmo 46:10 nos recuerda: "Estad quietos, y conoced que yo soy Dios". En medio de las tormentas de la vida, es importante recordar que Dios es el soberano sobre todas las cosas. Su amor perfecto nos da la tranquilidad para confiar en que Él tiene el control y que su voluntad prevalecerá.
Cuando enfrentamos desafíos, es fácil caer en la desesperanza y el miedo. Sin embargo, en 1 Juan 4:18, se nos asegura: "En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor". Dios nos ama con un amor perfecto, libre de temor y preocupación. Podemos descansar en este amor, sabiendo que Él cuida de nosotros en todo momento..
Aunque a veces nos enfrentamos a situaciones difíciles o dolorosas, recordemos que Dios nunca nos abandona. Su amor inagotable es capaz de transformar cualquier situación y llevarnos a la victoria.
Dios nos ama con un amor perfecto, y su plan para nosotros es bueno. Podemos descansar en esa verdad, sabiendo que Él tiene el control de todo. Mantengamos nuestros ojos puestos en Él y confiemos en su fidelidad. En su amor eterno, encontramos la fuerza para perseverar y la esperanza para un futuro lleno de bendiciones
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