Tomado de: Reflexiones
Por María Lozano
“No me deseches en el tiempo de la vejez; cuando mi fuerza se acabare, no me desampares.” (Salmos 71:9) La traición humana hiere, pero Jehová nunca abandona.
“Aun en vuestra vejez yo seré el mismo… yo os sostendré y os guardaré.” (Isaías 46:4) Entendí que, aunque nadie reconociera mis sacrificios, Jehová nuestro Dios los había visto todos. Y que honrar mi propia vida también era obedecerle.
“Aunque mi padre y mi madre me dejaran, con todo, Jehová me recogerá.” (Salmos 27:10) Ese día decidí algo distinto: ya no vivir solo para los demás, sino aprender a cuidarme a mí mismo en la presencia de Jehová. Porque cuando los hombres me rechazan, Jehová me recibe con brazos abiertos.
Éxodo 20:12 “Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da.”
Proverbios 23:22 “Oye a tu padre, aquel que te engendró; y cuando tu madre envejeciere, no la menosprecies.”
Isaías 46:4 “Aun en vuestra vejez yo seré el mismo, y hasta las canas os sostendré; yo os hice, yo
No hay comentarios:
Publicar un comentario