Tomado de: Entre café y libros
Por María Lozano
Su dulce mirada cautivadora coincidía con su escaso apasionamiento y artilugio.En efecto, espontáneamente su gracia no pasa desapercibida.
Al fin y al cabo, lo natural se manifiesta.
No cabe duda, de esos afortunados mortales.
Comprobado en su faz.
La vida dota de gracia y agilidad a lo sencillo.
Se aprecia hasta en las más oscuras penumbras.
En un absoluto indispensable aprendes a distribuir tu tiempo.
Guillermo Rosales Medellín.
DAR
No hay comentarios:
Publicar un comentario