Por María Lozano
Santiago 4:7
Como hijos de Dios pidámosle que nos ayude a discernir la obra del enemigo en nuestra vida. Él nos ha dado muchas armas para combatir los planes del mal, pero no lo podrá lograr si no ponemos de nuestra parte. Cambiemos nuestra actitud y miremos con optimismo las dificultades de la vida, por ello en vez de dar la espalda a Dios o regañar contra él cuando las cosas van mal, tratemos de estar en actitud de agradecimiento y tranquilidad porque si depositamos nuestros problemas en sus manos, veremos como todo se solucionará y veríamos con otra perspectiva la vida.
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