Tomado de: Alfonso De Caro
Por María Lozano
¡Qué hermosos son sobre los montes los pies del que trae buenas nuevas, del que anuncia la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salvación, del que dice a Sión: Tu Dios reina! Isaías 52:7.Hace unos años, estaba predicando en algunas iglesias. Una noche, hablé en una comunidad bautista abarrotada, donde muchos cantaban el coro " Nuestro Dios Reina". Me divirtió ver en la partitura que cantaba la congregación que el mecanógrafo había cometido un error en el título del himno, que decía: "¡Nuestro Dios Renuncia!". Muchos cristianos actúan como si Dios hubiera renunciado. Pero no es así. ¡Nuestro Dios reina! Esto es lo que debemos declarar. Debemos mostrarlo con nuestros rostros y dejar que se escuche en nuestras voces. Dios vendrá y los tiempos terribles terminarán. Nosotros (e Israel) algún día oiremos el llamado de bienvenida: ¡ Apartaos, apartaos, salid de allí! ¡No toquéis nada inmundo! ¡Salid de allí y purificaos, los que lleváis los utensilios de la casa del Señor! (Isaías 52:11)
Eso es lo que se requiere de los cristianos hoy. No debemos seguir los caminos erróneos del mundo, persiguiendo ilusiones y buscando cosas que no satisfacen. Más bien, debemos purificarnos, porque la promesa es: «Pero no saldrán apresurados ni huirás; porque el Señor irá delante de ustedes, y el Dios de Israel será su retaguardia». (Isaías 52:12).A menudo somos como los israelitas en el Mar Rojo: el agua ante nosotros, el ejército del faraón pisándonos los talones. No sabemos adónde ir ni qué hacer. Pero entonces llega la palabra del Señor: « Manténganse firmes y verán la liberación que el Señor les traerá hoy» (Éxodo 14:13). Esa es la salida. Confía en tu Señor. Él abrirá un camino a través del mar.
POR FAVOR ORA CONMIGO
Gracias Padre mío y Dios mío, porque solo puedo recurrir a ti, y tú eres fiel. Confío en que irás delante de mí y serás mi retaguardia. Gracias por tu amor Jesús. Amén.
Aplicación de vida

Te bendigo en nombre de nuestro Señor Jesucristo. Un fuerte abrazo.



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