Tomado de: Entre café y libros
Por María Lozano
No es la luna, tan solo eres tú,
que llenas mi cuerpo de vida.
Es tu esencia el misterio
de tu ser, tu mirar, tu presencia,
alteras la adrenalina en mí.
Tú, mi sueño posible, mi despertar increíble.
Desde el contacto de nuestros ojos es lo que alivia,
lo que da esperanza, la lluvia
que ahora cae a nuestro alrededor.
Somos uno en la órbita
del brillo o de la penumbra, según sea el instante,
como si fuéramos integrales de otra existencia, el rastro que deja,
en el nacimiento de este amor..Quisiera escribirte las palabras que fueran
justas, necesarias para una canción,
aceptando cada silencio sin interrumpirlo, ser fracción
del silencio, de los instantes en que nada se dice, estar atento
para que no se escapen.
Lo leí alguna vez, “que lo único
que se parece a la poesía es amar y ser amado”, esa esencia
que se escribe y se conjuga en versos, en ocasiones nos elevan
a lo más alto, enamorando hasta el éxtasis en nuestro interior.
No hay mejor latitud que cuando se está enamorado,
te evidencias tanto interna como externamente.
Nos fue dada esa oportunidad para amar, intentémoslo.
Guillermo Rosales Medellín.
DAR
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