Tomado de: Guillermo Rosales Medellín
Por María Lozano
eterna tarde perenne.
Aroma a petricor,
de lluvia tenaz.
En el tranvía del desenlace,
llevo mi vida efímera.
El alba anuncia la llegada
y anuncia el sempiterno día..El viento es etéreo y radical.
Y yo nefelibata vivo.
Sonrío melifluo y afectuoso.
La aurora descubre mi yo
y no puedo ocultar mi efervescencia.
Ojalá pudiera hacerlo con un ademán.
Y ahora, en esta soledad, se disfruta igual.
Evito el superfluo,
la época actual no.
Infinita es la utopía.
La compasión es remediable.
Casualmente la serendipia es fortuita.
Inmarcesiblemente es la juventud,
inefable y sutil,
pero con mucha epifanía.
Nunca serán olvido o mejor dicho, jamás son olvidables.
La resiliencia nos hará fuertes.
Sin desprendernos de la melancolía,
porque es sempiterna como la felicidad.
Guillermo Rosales Medellín.
DAR
No hay comentarios:
Publicar un comentario