Da de lo que tienes

 Tomado de: Alfonso De Caro

Por María Lozano

“Dios, que proporciona semilla para el sembrador y pan para comer, también te proporcionará toda la semilla que necesitas y la hará crecer y producir una rica cosecha de tu generosidad. Él siempre te hará lo suficientemente rico para ser generoso en todo momento, de modo que muchos agradecerán a Dios los dones que reciben de nosotros. Porque este servicio que realizan no solo satisface las necesidades del pueblo de Dios, sino que también produce una gran gratitud hacia Dios ". 2 Corintios 9: 10-12 (GNT)
Lo que Dios te da a ti, Él quiere darlo a través de ti.
Dios está buscando personas a las que pueda usar. Mira a tu alrededor y pregunta: "¿Serás un vaso o serás un pitillo?" Si eres un vaso, simplemente te llenas, y eso es todo. Pero otro tipo de persona dice: "Dios, seré un pitillo y tú puedes canalizar tu bendición a través de mí a otras personas". Ese es el tipo de persona que Dios quiere bendecir.
Esta promesa se basa en su voluntad de compartir lo que Él te proporciona. ¿Estás dispuesto a transmitir la bendición de Dios a otros?.Puedes decir: “¡Espera un minuto! No soy lo suficientemente rico para ser generoso." ¡Oh, sí, lo eres! No importa cuánto o qué poco tengas, puedes ser generoso como el SEÑOR.
Hay una historia en la Biblia sobre una mujer que solo tenía dos centavos, pero los regaló. La idea que "no tengo suficiente para dar" es un mito. Siempre puedes dar algo. La Biblia dice: “Por este servicio que realizas no solo satisface las necesidades del pueblo de Dios, sino que también produce un derramamiento de gratitud hacia Dios” (2 Corintios 9:12 GNT).
Cuando estás pasando por un momento difícil, todavía puedes decir: “Dios, no tengo mucho, pero estoy dispuesto a compartir. Solo tengo un poco de comida, pero estoy dispuesto a invitar a alguien a cenar."
Cuando haces esto, Dios promete tres cosas. Primero, crecerás espiritualmente. En segundo lugar, lo utilizará para satisfacer las necesidades de otras personas. Y, tercero, le traerás gloria.
Cuando regales de lo que tienes, Dios abrirá la puerta de la bendición en tu vida de maneras que no puedes imaginar.
REFLEXIONA
¿Con qué te ha bendecido Dios? ¿Con quién puedes compartir esa bendición esta semana?
Si crees que no tienes mucho para dar en este momento, ¿qué crees que Dios espera de ti?
¿Cómo has visto a Dios bendecirte a través de tus ofrendas?
Te bendigo en el nombre de Jesucristo. Un fuerte abrazo.

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“Dios, que proporciona semilla para el sembrador y pan para comer, también te proporcionará toda la semilla que necesitas y la hará crecer y producir una rica cosecha de tu generosidad. Él siempre te hará lo suficientemente rico para ser generoso en todo momento, de modo que muchos agradecerán a Dios los dones que reciben de nosotros. Porque este servicio que realizan no solo satisface las necesidades del pueblo de Dios, sino que también produce una gran gratitud hacia Dios ". 2 Corintios 9: 10-12 (GNT)

Lo que Dios te da a ti, Él quiere darlo a través de ti.

Dios está buscando personas a las que pueda usar. Mira a tu alrededor y pregunta: "¿Serás un vaso o serás un pitillo?" Si eres un vaso, simplemente te llenas, y eso es todo. Pero otro tipo de persona dice: "Dios, seré un pitillo y tú puedes canalizar tu bendición a través de mí a otras personas". Ese es el tipo de persona que Dios quiere bendecir.

Esta promesa se basa en su voluntad de compartir lo que Él te proporciona. ¿Estás dispuesto a transmitir la bendición de Dios a otros?

Puedes decir: “¡Espera un minuto! No soy lo suficientemente rico para ser generoso." ¡Oh, sí, lo eres! No importa cuánto o qué poco tengas, puedes ser generoso como el SEÑOR.

Hay una historia en la Biblia sobre una mujer que solo tenía dos centavos, pero los regaló. La idea que "no tengo suficiente para dar" es un mito. Siempre puedes dar algo. La Biblia dice: “Por este servicio que realizas no solo satisface las necesidades del pueblo de Dios, sino que también produce un derramamiento de gratitud hacia Dios” (2 Corintios 9:12 GNT).

Cuando estás pasando por un momento difícil, todavía puedes decir: “Dios, no tengo mucho, pero estoy dispuesto a compartir. Solo tengo un poco de comida, pero estoy dispuesto a invitar a alguien a cenar."

Cuando haces esto, Dios promete tres cosas. Primero, crecerás espiritualmente. En segundo lugar, lo utilizará para satisfacer las necesidades de otras personas. Y, tercero, le traerás gloria.

Cuando regales de lo que tienes, Dios abrirá la puerta de la bendición en tu vida de maneras que no puedes imaginar.

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¿Con qué te ha bendecido Dios? ¿Con quién puedes compartir esa bendición esta semana?

Si crees que no tienes mucho para dar en este momento, ¿qué crees que Dios espera de ti?

¿Cómo has visto a Dios bendecirte a través de tus ofrendas?

Te bendigo en el nombre de Jesucristo. Un fuerte abrazo.

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